Hna. María Alcalde
"... Teníamos que ir al Hospital Militar, allá íbamos cada día ... y era muy duro, muy duro. Yo decía: no sé si yo voy a seguir adelante estudiando la enfermería ... pero pensaba: y todas las Hermanas lo han estudiado y ¿yo voy a ser tan cobarde? ... ¡Adelante!"
Cuando la Hermana María Alcalde iba a catequesis, con 10 o 11 años, visitaba el hospital, dónde veía cómo las Religiosas de San José de Gerona se ocupaban de las personas que estaban enfermas. A veces, pensaba que quería ser como esas Hermanas, y así se lo manifestaba a su padre, quien le decía que tenía que pensárselo muy bien.
Cuando tenía casi trece años, puesto que insistía en su vocación, sus padres le dieron permiso para ir al aspirantado, en la Clínica del Remei de Barcelona. Tres años después, momento en el que debía decidir si quería volver a casa o continuar en el camino para ser Religiosa, optó por entrar en el noviciado, en la Casa Madre de Girona.
Una vez realizados los votos temporales, fue destinada a la comunidad de Hermanas de la Clínica San José de Barcelona y empezó a estudiar enfermería en el Hospital Militar.
Tras terminar los estudios sus compañeras y ella esperaban con ilusión y curiosidad su primer destino: ¿a dónde la enviarían? El secreto quedó desvelado el día que le comunicaron que ayudaría en la administración de la Clínica San José, donde ya estaba. Aunque, como dice ella, "no sabía de cuentas", allí estuvo dos décadas.
Años más tarde tubo oportunidad de volver a cuidar de forma directa a muchas personas, cuando fue destinada al Centre Geriàtric Maria Gay (Centro Geriátrico).
Actualmente reside en la Comunidad de la Casa General del Instituto, en Madrid.