
Hna. M. Felicidad Saiz González
"Desde la misión compartida, debemos ir unidos para cuidar a todas las personas que nos necesitan"
La Hna. María Felicidad Saiz González ejemplifica una vida de vocación entregada a la misión y carisma del Instituto de Religiosas de San José de Gerona. Con solo 21 años, fue destinada a Colombia, donde hizo su labor en una antigua clínica del Instituto, atendiendo maternidad y personas mayores. Allí vivió momentos duros, como un terremoto en Cali que obligó a evacuar a los enfermos a la calle.
En 1969, coincidió con el inicio de la construcción de la nueva Clínica de los Remedios, a las afueras de Cali, una ciudad que recuerda con cariño, con su belleza colonial.
A su regreso, fue destinada a la Clínica Nostra Senyora del Remei de Barcelona, con toda la actividad de aquel momento, con hasta 80 enfermos por planta. Allí trabajó como enfermera y formó equipos sanitarios.
Más adelante, asumió la responsabilidad en el Gobierno General del Instituto, en Madrid, como ecónoma general durante 12 años, lo que le permitió visitar comunidades de las Hermanas en África y apoyar mejoras en centros como el consultorio de Nyarusange (Ruanda). Ella recuerda con humor anécdotas culturales vividas en estas visitas.
Su experiencia en administración fue amplia, en tiempos previos a la digitalización, cuando todo se llevaba en libretas.
Explica que en sus primeros años como novicia, el carisma de María Gay aún no se enseñaba de forma estructurada: se aprendía y se transmitía el "Servir y Velar" observando cómo cuidaban a los enfermos y personas mayores las Hermanas.
Desde la Comunidad de Olot, donde sigue residiendo, vivió una etapa muy querida dentro de la pastoral de la salud. Y recalca que la Residència Santa Maria del Tura es en esta ciudad un referente reconocido, con un trato cercano y humano hacia las personas mayores.
Hoy sigue defendiendo firmemente en la misión compartida del Instituto entre Religiosas y laicos, un legado vivo que continúa la obra de María Gay, cuidando y acompañando con ternura a las personas vulnerables. "Desde la Misión Compartida, tenemos que ir unidos para cuidar a todos los enfermos que nos necesitan", afirma.